En esta nueva colaboración ha desarrollado una colección, lavable a máquina, formada por suéters, jerseys de cuello alto y cardigans 100% lana Merino que realzan las cualidades naturales de la fibra como son suavidad, control de olores, transpirabilidad, resistencia, ligereza, fácil cuidad y elasticidad. La colaboración –que comenzó en 2012- sigue siendo una declaración de intenciones que apuesta por la alegría y la modernidad en moda infantil.
Desarrollado en colaboración con el programa Mothers and Babies de The Woolmark Company, la colaboración da un mensaje muy claro, la lana es una elección natural en prendas para los niños. La lana Merino transpira de forma natural convirtiéndose en un regulador de temperatura. De tacto suave, la lana Merino es una excelente opción para mantener a los niños protegidos y cómodos durante todo el año. Absorbe el vapor de humedad lo que ayuda a mantener la piel seca de los niños Además, la fibra de lana Merino cuenta con un protector natural con una alta resistencia a la suciedad ya que repele los agentes externos.
The Woolmark Company:
El sello Woolmark es la marca textil más conocida del mundo, establecida en 1964.
El sello Woolmark es propiedad de Australian Wool Innovation (AWI), una organización sin ánimo de lucro propiedad de 25,000 ganaderos australianos. La visión de AWI es contribuir a una industria dinámica, estable y rentable ofreciendo al mundo la mejor fibra natural del mundo. La empresa trabaja con toda la cadena de proveedores a nivel global – desde los ganaderos hasta las tiendas.
La misión de la compañía es mejorar la rentabilidad, la competitividad internacional y la sostenibilidad de la industria lanera australiana, aumentando el acceso al mercado y la demanda de lana Australiana.
La lana Merino proporciona estabilidad, durabilidad, suavidad y lujo a la industria de la sastrería. Esta fibra ha sido y es la favorita para muchos diseñadores aunque muchos consumidores jóvenes, nacidos en la era del “fast fashion” desconocen los beneficios de la lana.
La lana es una fibra 100% natural y renovable. Las ovejas viven de los pastos, agua, aire fresco y sol. La lana es una fibra que crece, no se fabrica. Cada año las ovejas producen un nuevo vellón, haciendo de la lana una fuente de fibra totalmente renovable.